miércoles, 24 de junio de 2009

CARLOS GARDEL 65 días antes de su muerte











... allá en San Juan de Puerto Rico


... por el Consulado de Venezuela


 

---- Buenas, Yo Soy Carlos Gardel y vengo a tramitar mi Cédula de Extranjero

---- Pase por acá, asi que me dijo Carlos Gardel, bien. Donde nació?

---- En Tacuarembó.

---- Donde?

---- En Uruguay, Tacuarembó, acá traje para que vea mis documentos, el certificado de buena conducta, la carta de ciudadanía legal, el registro del consulado uruguayo, la libreta de enrolamiento, el DNI, el pasaporte, y hasta le traje el permiso para trabajar en Europa y en todos dice lo mismo, “Uruguayo nacido en Tacuarembó”, y mire que los trámites los hice yo personalmente y todo legal.

---- Bueno a ver a ver ... Registro ante el consulado uruguayo en Buenos Aires y Cédula de Identidad Nº 383.017 del año 1920; Carta de Ciudadanía Legal Argentina y Certificado de buena conducta Nº 218.125 expedido por la policía de la Capital Federal en el año 1923; Libreta de enrolamiento Nº 236.001 del año 1927; Libreta de ciudadanía, nuevo pasaporte y certificado de buena conducta Nº 383.017 del año 1930; Carta valable francesa del año 1931 y Pasaporte N° 02421, expedido en el consulado argentino en Niza renovado en Buenos Aires del año 1933.
Si, acá está bien claro que todos estos documentos públicos de identidad fueron certificados por las autoridades competentes y dicen “Uruguayo”.
Bien, siendo el 20 de abril de 1935 y conforme a derecho le será expedida Cédula de Identidad Extranjera Venezolana.


---- Dele nomás, es la verdad, yo hablo por mi mismo y siempre he declarado ser Uruguayo, y mientras he vivido nadie me ha contradicho.

---- Muy Bien, está pronto.
Acá tiene Don Carlos Gardel otro documento legítimo que refrenda fehacientemente su verdadera identidad, como lo solicitó, y hasta el Sr. Cónsul dejó expresa constancia de que usted es de nacionalidad originaria uruguaya, argentina adquirida y nacido en Tacuarembó, Uruguay.


---- Buenazo hermano, más criollo imposible !!!
Ahora si que no van a quedar más dudas, porque viste como es esto, uno nunca sabe ... tengo cada “amigos” !!!



























Safe Creative #0908274281258

sábado, 20 de junio de 2009

LA FIRMA ES DE GARDEL? ... USTED JUZGUE





 

Firma realizada por CARLOS GARDEL en su Pasaporte tramitado el 13 de Diciembre de 1932






 
Firma realizada por CARLOS GARDEL en carta a su empresario Flores el 31 de Julio de 1934





 
Firma que aparece en el papel que presentó un Argentino de apellido Defino como testamento luego de la muerte de CARLOS GARDEL, lo que permitiera que una Francesa de apellido Gardés heredara.

 Y EL QUE TENGA OJOS QUE VEA !!


Esta firma que luce al pie del testamento ológrafo, la que fuera obtenida por el investigador Silva Cabrera en los archivos de los tribunales argentinos, bien burda y de trazos marcadamente diferentes a los que habitualmente estampaba Carlos Gardel, por la vía de la investigación procesal y administrativa nunca a sido sometida a peritaje caligráfico puesto que, al día de la fecha, no ha mediado impugnación de terceros, reclamación de ningún interesado o denuncia formal ante cualquier sede judicial.

 


PERO BUENO




DICEN

QUE

NUNCA ES TARDE








Safe Creative #0908274281661

lunes, 1 de junio de 2009

EL BRAVÍO ORTIZ Y AL FIN CARLOS GARDEL





 


11/12/1806: Nace el uruguayo Dámaso Ramón Jiquiao Ortiz, siendo bautizado en la Parroquia de San Isidro de Las Piedras.
01/05/1825: Tras su entrada en la Cruzada Libertadora con los caballeros orientales, pasa a ser escolta del General Lavalleja, desde la Primer Compañía del Regimiento de Dragones Libertadores.
01/06/1825: Revista en el Regimiento de Dragones de la Unión, en la 8ª Compañía del 2º Escuadrón, al mando del Mayor Bernabé Rivera, en el ejército de Vanguardia. Se incorpora al Ejército Republicano interviniendo en la Batalla de Ituzaingó.
08/09/1828: Integra la Caballería de Línea del Regimiento Nº 9, destacado en San José.
08/05/1838: Por disposición del General en Jefe, obtiene su ascenso como Capitán, y tras la graduación abandona el cuadro de efectivos militares.
24/01/1844: Es destacada su bravura en la llamada “Guerra Grande”, oportunidad en que vuelve al combate, ahora desde las filas del Brigadier Justo José de Urquiza.
01/06/1858: Se lo asciende a Teniente Coronel de Caballería de Línea.
19/12/1862: Es nombrado Jefe del 1er Regimiento de Guardias Nacionales de Tacuarembó.
20/02/1865: Habiendo combatido contra las fuerzas Revolucionarias del General Flores y tras ser de los defensores del asedio a Paysandú, debe exiliarse en San Antonio de Concordia de la Provincia de Entre Ríos.
03/01/1867: Fallece en la Argentina a raíz de las heridas sufridas tras accidentarse en rodada con su caballo.




Nuestro heroico Ramón Ortiz se casó con Doña Joaquina Sequeira en 1827, siendo su padrino de boda el Brigadier General Juan Antonio Lavalleja. Nos cuenta el Diario “El Heraldo” de Tacuarembó - Nº 620 de su año VII - (propiedad del Coronel Escayola y cuyo Director fuera su cuñado el tipógrafo y tío de Gardel Don Clelio Oliva, casado con una de las nietas de Don Ortiz), que Doña Joaquina dijo:



“ ... se presentó Lavalleja acompañado de su asistente Ramón Ortiz, uno de los Treinta y Tres orientales que desembarcaron en la Agraciada, al que conocí por vez primera, y que más tarde debía ser mi esposo. Al penetrar Lavalleja a la sala se dirigió jovialmente a nosotras las muchachas, diciéndonos:
-Que tal ¿no se han casado con portugueses?

Y como no le contestáramos negativamente se dirigió a mi, entonces, con estas palabras:
- Ahí te traigo un porteño pa que te cases con él.

¡Que había de ser! Nació también en Canelones, y a la edad de 7 años se fue para Buenos Aires, de donde no volvió hasta iniciarse la campaña libertadora (cuan común era el verso de hacerse el Argentino en esa época). Pero era un porteño hecho hasta en el modo de caminar; después se corrigió. El pisó en la Agraciada con el cargo de asistente de Lavalleja; tendría entonces 18 años: apenas le apuntaba el bozo.
Es muchacho guapazo –decía Lavalleja-. Yo lo tenía para que me cuidara la caballada, y en lo mejor se me aparecía mi Ramón en lo más crudo de la pelea, lanceando a diestra y siniestra, y con mi valija colgada de los tientos del recao. Cierta vez la perdió así, y fue encontrada por un soldado, quien la recogió ensartándola de á caballo en la punta de la lanza. … "



En el año 1838 ya encontramos a este matrimonio viviendo en dos suertes de campo suyos en la Villa de San Fructuoso. Tras la muerte en el 67 de Don Ortíz, su esposa, hijas y nietos quedarían al frente de uno de los establecimientos ganaderos más importantes de Tacuarembó. Era la época de la “California del Sur” donde a la rica Villa llegaban europeos de toda clase, en atención a los requerimientos de la fiebre de las minas del Oro.

El éxito económico de la región era administrado por su Jefe Político, Militar y de Policía, el Coronel Escayola, al igual que el Cabaret “La Rosada”, lugar de esparcimiento habitual de los hombres de la época. En tal ostentoso lugar trabajaban varias chicas, como una francesa quien sabido es “planchaba” a la noche, porque de día “planchaba” a domicilio para los ricos estancieros de la vuelta. Al Coronel también le hacía otros favores, dinero mediante, como el ser encargada junto a otra empleada de la crianza del gurisito que había tenido con su pequeña cuñada y ahijada María Lelia Oliva (conocido luego como Carlos Gardel).

Dejó de practicar el Oficio cuando se enteraron que el nieto de Don Ramón Ortiz, el Cipriano Romualdo, la había dejado preñada. Parir su propio crío significaba ausentarse del poblado de los Tacuaremboes, por lo que aceptando sugerencias decidió continuar su carrera de “planchadora” por otros pagos, llevándose previo acuerdo al guachito de Escayola, cual zorzal crecido ya metía demasiado barullo revoloteando cerca del nido del Coronel. Lamentablemente cierto el hecho de que Carlitos se volvió muy visible, y si la iglesia comprobaba la existencia de este niño producto de adulterio no solo no autorizaría el tercer matrimonio de Escayola con la mamá de Gardel, sino que sería el fin de una ascendente carrera política.

Doña Joaquina nos muestra las rigurosidades religiosas del entonces: 



"... formadas en extensa comitiva salimos para la iglesia, Ortiz y yo delante, el General Lavalleja y su esposa Anita Monterroso enseguida y otros, amigos más, que nos acompañaban en el acto de celebrarse las tan deseadas nupcias. ¡Extraña manera de casarse la de entonces! Figúrese usted que entramos al templo a media noche y estuvimos allí hasta el amanecer, siempre hincados, oyendo las oraciones y consejos del sacerdote; vino luego la ceremonia nupcial, y después aún tuvimos que oír misa. ¡Que tiempos aquellos! Entonces las gentes creían en la religión; no eran como hoy que ni se acercan a los curas.”



Resolución: Carlitos Gardel ya grandecito para los Montevideos a estudiar de la mano de la empleada gala, y Papá y Mamá a casarse ahora con las correspondientes bendiciones eclesiásticas, porque podías ser jefe político, coronel, masón, rey del oro y la mar en coche, pero contra la Iglesia nada, sino fuiste.







Safe Creative #0908274282002
Blog Widget by LinkWithin